15 ago 2007

Madrid

Llevo dos días aquí, mañana por fín vuelvo a casa.

Para mí Madrid es agotador. Probablemente sea porque siempre vengo a trabajar y aprovecho los ratos libres para "ir de compras" o "hacer algo".

Es caso es que, aun sin moverme muy lejos de Callao, siempre ando muchísimo (claro que más de 5 minutos andando ya es muchísimo más que cualquier caminata en Palma, donde voy a todas partes en coche).

Será porque no estoy acostumbrada a pasear, porque no suelo tener prisa para ir a ningún sitio (lo de no llevar el coche hace que normalmente vaya con tiempo, por si acaso), o porque simplemente no es mi ciudad, pero siempre hace que me sienta una extraña. Tengo la sensación de que la gente me mira y con una ojeada ven de manera obvia que "soy forastera". Sólo es una sensación.

Igual que la sensación de ir siempre sola a casi cualquier sitio. En las tiendas o las terrazas todo el mundo va de dos en dos o en grupitos y yo ya me encuentro cómoda caminando sola por cualquier parte o sentada delante de un te (normalmente con un libro, porque no tiene sentido hacer tiempo delante de un te si no tienes nada interesante que hacer).

O haciendo la compra. ¿Os habéis fijado que casi nadie va solo al Carrefour o al Corte Inglés?

Estas cosas siempre se me ocurren cuando estoy por aquí. En Palma voy pensando "¿Compro canónigos? La verdad es que no tengo ganas de sandwich guarro hoy. Mejor me llevo queso y me hago unos crêpes. ¿Y pan?"

En Palma también voy pensando "Tengo que acordarme de llamar a Fulanito cuando llegue a casa, que aquí delante de la cajera no es plan. Y a Emaya! No puedo creer que me haya vuelto a olvidar de llamar a Emaya"

Pero en Madrid camino sola, me pongo el mp3, procuro no acelerar el paso, me escondo tras las gafas de sol y sonrío cuando algún obrero me echa un piropo (¿por qué la mayoría de mujeres les ignoran o les insultan? yo nunca he oído nada de mal gusto ni con mala intención, son como niños pequeños que "chulean" delante de los amigos, y se quedan tan felices cuando te giras y les sonríes...).

Y me encanta el metro. ¿Cómo puede pasar un metro cada 5 minutos? Deben ser un montón. ¿Como puede salir rentable tener tantas máquinas funcionando tanto tiempo? Claro que si casi siempre están llenas...

Total, en Madrid trabajo, paseo, pienso, me canso, duermo mucho más profundamente, y estoy deseando volver a mi casa.

3 comentarios:

The Thing dijo...

Madrid...

Llevo más de dos años sin ir, camino de tres, y no hay previsión.

Habré ido unas 5 veces y media en los últimos 17 años ("y media" porque una a la ida y otra a la vuelta no se puede decir que sean dos si la vuelta es para pasar la noche y poco más) y creo que sólo lo puedo asociar a algo parecido a vacaciones, aunque sólo estuviese un agosto.

Es grande y se nota en el tiempo que tardas en llegar de un lugar a otro, pero no tanto en el trayecto como cuando has llegado y ves lo que te ha llevado.

Una vez me recorrí toda la Gran Vía hasta Cibeles y luego hasta el Bernabeu, a patitas. Me llamó la atención que tardase más en volver en bus.

De Madrid tengo un puñado de buenos recuerdos, incluyendo algunos en la lista de los "best of all times". También hay unos cuantos de los de escribir en un papel que tirar por la cisterna, acaso pudieran olvidarse así.

Me gusta el metro, desde la primera vez que monté (hace una década ya? uf...), pero sobre todo desde que "me perdí" saliendo por la boca que no era, pues la que sí era estaba fuera de servicio por obras. Tardé lo que un suspiro en orientarme (y dar gracias a los libros de indios que leí de pequeño...), pero fue divertido.

También creía que deberían ser muchos los trenes para haber uno cada cinco minutos. Luego te paras a pensar en las distancias que recorren, las velocidades a las que van y que son eso, 5 minutos en llegar cada uno y te empiezan a salir cuentas de que no son tantos. Lo sé, a veces hago cálculos no demasiado productivos...

P.D. Yo soy de los que suele ir solo al Carrefour y Corte Inglés.

Unknown dijo...

yo también voy sola al carreful y al corte inglés. Yo que soy madrileña:

-odio el metro, aunque reconozco que es más soportable que los atascos.
-me encanta pasear por las calles
-jamás me he preguntado la cantidad de metros que hay, sólo me he preguntado por qué cojones se retrasan.
-He pasado 35 años de mi vida allí así que tengo infinidad de buenos recuerdos.


ilu, ya podías haber dicho algo, si vienes con tiempo otra vez, te voy a buscar y te traigo a casa (luego te llevo otra vez)

ir con "la cosa" por madrid es muy divertido.

ilu dijo...

He estado con trabajo y se suponía que no iba a tener tiempo de nada.

Pero vuelvo en septiembre :)