el viaje II
He cambiado, me he dado cuenta en este viaje, a saber:
- no he entrado en ninguna tienda GAP a probarme vaqueros
- no he entrado en ningún FNAC
- no he entrado en ningún cibercafé a conectarme
- no he smseado (salvo para responder a un señor estupendo que me dió una grata sorpresa)
- me han entendido a la primera cuando he hablado en francés (o sea, en el metro y según se oye: sil vu plé, an tiké alé e retur pur le parc des expositions, merci... an reçu sil vu plé, merci bocú.. ah, y en la creperie: la crep du chevre e apré crep o chocolá, una heineken), tampoco es tanto pero oye.. mola, a parte de que unos cuantos señores me han dicho unas cuantas cosas que he entendido perfectamente y a las que he contestado con un jiji tontorrón mientras pensaba "anda y q te den, cabrón"
es por esto que va a ser, como dice un amigo, que he entrado en la madurez.
por otro lado los franceses son muy educados cuando se dirigen a una, lo hacen muy bien, otra cosa es que cuando les respondes y ven que no eres uno de ellos te pasen a hablar directamente en inglés, pero bueno, se entiende.
He disfrutado mucho el viaje, he andado mucho, unas... ocho horas cada día por lo que luego he dormido como un lirón, de la forma más profunda que recuerdo en mucho tiempo. La compañía ha estado genial, recordando viejos tiempos con mis nuevos clientes excompañeros, aguantando a una aspirante a diseñadora con temple que no dejaba títere con cabeza para criticar, a cualquiera que se le cruzara el comentario: "fulanito? es un cabrón... esos son unos cabrones... qué cabrón.." por dios, donde vamos a llegar.. además es contagioso, te pasas una hora con ella y acabas encabronao...
el viaje de regreso se me hizo eterno, casi dos horas de retraso el avión y luego atasco para salir de madrid.. no veía el momento de llegar a casa. Cuando llegué casi me como a toda la fauna y a mi santo, qué ganas! Las perras se pusieron contentísimas, da gusto que a una la quieran oyes... aunque sean faunos...
3 comentarios:
Pues claro que has cambiado. Antes te relacionabas con niños, despues con niñatos, luego con chicos, más tarde con hombres y ahora con señores!!! Si, si, si, a envejecer se le llama madurar ;-p
NO has cambiado, has crecido.
Chica, qué envidia!! Cómo me gustaría que a mí me quisieran así y que mi santo y los faunos me comiesen... y yo tuviese la misma gana de comérmelos.
Bueno, perdón, yo tengo dos pequeños roedores muy comestibles...
pues así dure hasta los 82 y me relacione con viejos verdes y rojos, y vosotros que lo leáis (aunque sea con gafas)
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